La covid-19 ha provocado importantes efectos económicos negativos, pero también ha comportado alguna tendencia positiva. Hemos podido ver cómo los usuarios que se han retrasado en el pago de las cuotas de sus planes fraccionados se han reducido un 22% respecto a febrero.
Concretamente, 7.400 usuarios registraron un nuevo retraso en sus pagos en el mes de mayo, una cifra que, aunque significativa, es muy inferior a los 13.200 consumidores con retrasos en sus cuotas de marzo o los 10.400 del mes de febrero. En total, 320.000 clientes tienen un plan de pago fraccionado con nosotros.
David Bäckström, CEO, apunta que “durante el confinamiento se han reducido mucho los gastos generales, no se ha salido a restaurantes, ni se ha viajado, por lo que ha sido más fácil afrontar los pagos pendientes”.
Esta tendencia a la baja, en cuanto a los impagos, se ha visto impulsada también por las medidas que hemos adoptado para ayudar a los compradores durante los meses de crisis sanitaria. Concretamente, la plataforma de pagos online ha permitido aplazar las facturas al mes siguiente eliminando cargos por impagos.
Según Bäckström, el principal objetivo de SeQura es cuidar a los consumidores y ayudarles con sus pagos cuando lo necesiten. Por este motivo, durante este periodo de confinamiento se han activado los protocolos para facilitar apoyo a aquellos usuarios que no han podido hacer frente a sus pagos cuando tocaba. “Es una situación excepcional y se tiene que ayudar a las personas con dificultades. Por ese motivo, nuestro equipo se encarga de analizar cada situación y proponer soluciones personalizadas para que puedan pagar sin agobios”, añade.